Hay momentos en los que parece que todo encaja y los esfuerzos, sudores y lagrimas acumulados comienzan a cobrar sentido. Son momentos en los que descubrimos nuestro interior oculto y olvidado, lo hacemos emerger y recuperamos partes de nosotros mismos que habian caido en el olvido.
Esto mismo puede pasarnos hacia afuera con la historia de nuestros antepasados. Algo que nos ha sucedido con el descubrimiento de unos restos relativamente bien conservados de la cultura prerromana de los vettones, hay varias antiquisimas construcciones y muchos restos y ruinas algunas veces reusadas o reconvertidas para otros menesteres como muretes de bancales.